Habitualmente una aficionada al fútbol debía vestir réplicas o camisetas de hombre para poder lucir con orgullo los colores de su club, o simplemente para poder jugar al fútbol. En muchas ocasiones estas camisetas salen de las mismas fabricas que las grandes marcas subcontratan para la fabricación de sus camisetas originales, aunque obviamente los tejidos y acabados no son los mismos.