En la pista era un auténtico monstruo que se pegaba con quien hiciera falta. En su vida privada los que le conocían aseguran que era bromista y ‘dicharachero’, imagen totalmente opuesta a la que ofrecía en los medios de comunicación, frío y distante, sobre todo con la prensa rosa, que estuvo continuamente pendiente de sus líos amorosos (tuvo una relación con Ana Obregón). Panero asegura que está dado de alta en el régimen de autónomos desde el 1 de septiembre para dedicarse a los dos trabajos que tiene ahora: vender ropa y lo que se precie en el local de su hermano, y vender pisos.Porque también es agente inmobiliario de Remax.